Muchos padres de perros quizás se hayan enfrentado a esta difícil pregunta¿Castrar o no castrar a tu perro?
Aunque pueda parecer éticamente incorrecto hacer pasar por esto a tu querida mascota, en muchas ocasiones más que un capricho es una necesidad. La castración influye de manera directa las hormonas gonadales, eliminando de esta manera la principal fuente de testosterona, en los machos (En el caso de las hembras, progesterona y estrógenos)
Millones de gatos y perros son abandonados o “puestos a dormir” (refiriéndose al sacrificio o eutanasia) al año. Entre las mayores causas están la cría excesiva y los comportamientos peligrosos para ellos mismos o para el propietario.
En muchas ocasiones esto viene de la mano con algún tipo de enfermedad que podría ser potencialmente curada mediante estos procedimientos. Sin embargo, no es una decisión fácil y debe pasar por un exhaustivo análisis de factores a favor y en contra.
¿La castración afecta el comportamiento?
Claramente, al cortar la fuente clave de progesterona disminuye conductas agresivas o conductas sexuales dimórficas (marcaje con orina, la monta, entre otros).
Usualmente reduce la agresión a los humanos y la agresión intersexual (Macho-Macho), a su vez disminuye la conducta cópula y otros comportamientos como lo son el Vagabundeo. Lo que podría prevenir peleas y obvios peligros como ser atropellados.
Según estudios realizados (Overall y Lowe 2001) se puede notar como en perros castrados antes de la primera cópula previenen estas conductas para el resto de la vida de la mascota.
Sin embargo, no se puede esperar que la castración elimine todo tipo de conducta agresiva, ya que gran parte de este tipo de comportamiento se debe al ambiente y proceso educativo al cual se sometió el animal.
Asimismo, la inactividad y letargia han sido relacionadas con la castración a las hembras en muchas ocasiones. Es recomendado que si una perra ha demostrado agresividad competitiva se contraindique una esterilización puesto que esto podría volverla más agresiva.
En los perros es normalmente considerada rutinaria y común, con bajas tasas de mortalidad y de complicaciones durante el proceso quirúrgico. Sin embargo, más allá del comportamiento diario del animal al que se someterá a esta cirugía, se deben tomar en cuenta la salud a mediano y largo plazo del mismo.
Por estas razones y muchas más la castración es un tema que debe ser puesto en debate. Muchos dueños se encuentran con esta difícil decisión.
¡Lo más importante es mantenerse abierto a las posibilidades, leer y buscar distintas opiniones!
Beneficios que se obtienen
Además de ser un método eficaz de control poblacional, es altamente recomendado para muchos perritos hoy en día. Esta es una de las decisiones sobre la salud de tu mascota más importante que tomarás. Ya que es uno de los procedimientos más comunes.
La esterilización o la castración (Remueven los testículos, en los machos, o los ovarios y útero, en las hembras) Es conocido por mejorar ampliamente la conducta y la salud de tu mascota.
- La hembra esterilizada no entrará en celo.
- Previene cáncer de mama en ellas y de testículos en ellos.
- Según estudios, su mascota vivirá una vida más larga y sana.
- El macho no sentirá la necesidad de vagar fuera de casa.
- Es uno de los tratamientos de prevención más económicos.
- Evita las infecciones urinarias.
- Reduce el instinto sexual.
- Evita problemas de próstata.
- Elimina los embarazos psicológicos en las hembras.
Existen muchos otros beneficios obtenidos por este procedimiento, los cuales deberás consultar con el veterinario para el caso específico de tu mascota.
En el caso de decidir por la castración, previamente a realizar esta cirugía se deberán llevar a cabo una serie de estudios. Debes verificar que estás poniendo a tu amigo en buenas manos, la edad y el peso del animal son cruciales para fases de la cirugía como el anestesiado.
Lo más recomendable es realizar los exámenes completos y tener a la mano el historial médico de tu mascota. Igualmente, las vacunas y los desparasitados deben estar al día. Sigue al pie de la letra las indicaciones del veterinario para el pre y post, así evitas cualquier complicación innecesaria.
¡Recuerda que tu compañero no eligió esto! Toma especial cuidado de ellos y haz la situación lo más amena posible.
Posibles complicaciones
Aunque es cierto que este proceso posee un campo más grande de beneficios que complicaciones, todo dueño que lo planee debería tomarlo en cuenta.
Las posibles complicaciones son:
- Aumento de peso que no corresponda al apetito (Señal de hipotiroidismo)
- Problemas dermatológicos.
- Problemas de vista.
- No toleran ejercicio por tiempos prolongados.
- Aumento desmedido del apetito.
Además de esto, se deben poner en consideración las posibles complicaciones durante el procedimiento quirúrgico. Si bien esto es un peligro muy poco probable, algo en la operación podría salir mal y complicar la salud de tu perro.
Igualmente, se sabe que la castración a edades muy tempranas puede tener que ver con huesos muy débiles. Las hormonas gonadales u hormonas sexuales controlan el proceso de consolidación de los huesos largos, lo que podría generar este problema.
Aunque esto sea un tema de alta complejidad y no existen verdades absolutas sino circunstanciales, se complica la toma de decisiones. Estar bien informado y poner en consideración las características físicas y actitudinales de nuestra mascota hace la diferencia.
A su vez, tomar en cuenta la opinión de especialistas en el área es crucial. Su única prioridad es procurar la salud y el bienestar de la mascota y su familia, por lo que se debe ser puntual y preguntar los riesgos reales en el caso específico del individuo.
Es de suma importancia no apresurar ni postergar demasiado el procedimiento, en caso de estar inclinado a un sí o de encontrarse en una situación que puede poner en peligro la vida del animal. Esto puede hacer la diferencia.
Lo más recomendado es realizar este procedimiento entre los 6 y 8 meses de edad, cuando tu mascota aún no ha alcanzado su madurez sexual. ¡Toma la decisión con precaución y todo irá bien!